lunes, 13 de abril de 2015

EJECUCIÓN DE SOLADOS CON TERRAZO.

Dada la problemática que en ocasiones puede surgir durante los trabajos de ejecución de los solados en obra nos parece que puede ser interesante para todos reunir una serie de recomendaciones a tener en cuenta a la hora dar instrucciones en obra y de controlar la ejecución de los trabajos.
Comenzaremos con el terrazo, en el que la calidad y durabilidad de un pavimento con este tipo de baldosas depende tanto de la calidad del material como de su correcta colocación. 

PROTOCOLO DE EJECUCIÓN:

PREPARACIÓN DE LA SUPERFICIE.

-          Acondicionamiento de la superficie: en interiores  debe estar totalmente limpia sin irregularidades, siendo las pequeñas absorbidas por el mortero de agarre, utilizando hormigón pobre en caso de tener irregularidades y desniveles. En el caso de trabajos en exteriores es imprescindible eliminar la capa vegetal y asegurar que se mantenga seca y bien drenada.

-          Replanteo de la superficie: en primer lugar se conocerá el espesor total del pavimento a la hora de replantear la cota máxima superior. Posteriormente para garantizar la horizontalidad y el escuadrado de las baldosas se trazarán las maestras que serán la referencia. Es muy importante controlar la nivelación y el encuadre de todas las piezas a medida que se va avanzando en su colocación, haciendo uso de hilos en las direcciones marcadas por las maestras y niveles.

EXTENDIDO DEL MATERIAL DE AGARRE.

Las baldosas se reciben con mortero de agarre o cemento cola que transmiten las cargas y adhiere las baldosas a la base soporte.

-          Mortero de agarre: previamente al extendido del mortero es fundamental humedecer la superficie de apoyo para evitar que ésta absorba agua y merme las cualidades del mortero. La composición y dosificación más usual del mortero de agarre es:

§  Una parte de cemento Portland, en general de clase 32,5.
§  De 4 a 6 partes de arena. La ideal para obtener una óptima fijación es una arena de miga (compuesta de feldespatos, cuarzo y una pequeña cantidad de arcilla).
§  Relación a/c adecuada para obtener una consistencia plástica. La cantidad de agua dependerá de las condiciones climáticas y la humedad de la arena.
§  Espesor de la capa de mortero: 25-40mm. Es recomendable que el mortero se vaya preparando y colocando a medida que avanza el trabajo. El empleo de morteros preparados que contengan aditivos retardantes de fraguado no es recomendable.

-          Cemento cola: útil para interiores. Previamente a la colocación del pavimento es necesario que la superficie esté nivelada y seca. La nivelación se consigue mediante mortero o pasta autonivelante que una vez endurecida se añadirá una capa de 1cm. como máximo de cemento cola, sobre la que se pasará una llana dentada para dar mayor adherencia con la pieza del solado.

JUNTAS TERRAZO.

Al igual que en otro tipo de pavimento deben disponerse juntas para optimizar su funcionamiento y permitir los movimiento originados por variaciones térmicas o propios de la estructura. Son tres los tipos juntas que deben disponerse en un pavimento:

-          Juntas de dilatación: deben coincidir con las estructurales. También deben disponerse ante la existencia de un elemento fijo ya se trate un pilar, arqueta, muro, registro, … para evitar que los esfuerzos de compresión originados por efectos térmicos pueda producir algún tipo de daño en las baldosas.

-          Juntas de contracción: su función es absorber los pequeños desplazamientos originado en los paños del solado, debido a saltos térmicos y evitar que se produzcan roturas. Generalmente suelen ser de forma cuadrada utilizando materiales adecuados (perfiles metálicos, etc.).

Tanto las juntas de dilatación como de contracción deben de quedar definidas en proyecto y la colocación de los perfiles en las juntas se realizará siguiendo las indicaciones del fabricante. Se destacan algunos criterios generales para la ejecución de juntas:

§  En pequeñas estancias como habitaciones, descansillos y pasillo el perímetro actúa como junta, por lo que se preverá una separación entre el paramento y solado de 3-4mm., suficiente para absorber cualquier movimiento.
§  En grandes superficies como aeropuertos, centros comerciales se dispondrán juntas cada 40m2 como máximo.
§  En las viviendas en las que el solado se ejecute previamente a la tabiquería, debe hacerse coincidir las juntas con los tabiques previstos.
§  Las juntas que queden en el exterior deben ser capaz de resistir las agresiones medioambientales. La junta de dilatación se pondrá en intervalos de aproximadamente 6m., de manera que formen áreas de 30m2 como máximo.
§  Las juntas de separación entre baldosas será de 1-1,5mm. en interiores y 1,5-3mm. en exteriores.

COLOCACIÓN DE BALDOSAS.

-          Colocación con mortero de agarre: el mortero se extiende sobre la superficie enrasándose con rastreles a las maestras previamente colocadas. Antes de la colocar las baldosas es recomendable humedecerlas y espolvorear cemento Porland sobre el mortero para mejorar la adherencia.

-          Colocación con cemento cola: el cemento se extiende sobre la superficie limpia y nivelada siguiendo las instrucciones del fabricante en cuanto a limpieza, tiempos de utilización, etc.

En ambos casos la colocación de las baldosas similar, siendo imprescindible su colocación antes de que el mortero o cemento comience a fraguar. Las baldosas deben de apoyarse sobre una de sus aristas de su cara inferior dejándolas caer suavemente una vez asegurada que se posición es la correcta. En caso de ser necesario se utilizarán crucetas para mantener el espesor de la llaga y su continuidad.

RELLENO DE JUNTAS DE SEPARACIÓN ENTRE BALDOSAS.

-          Pavimentos de interior: la operación de relleno de juntas se realizará 24 horas después de la colocación del pavimento para evitar que se ensucien las juntas. Para obtener el resultado deseado hay que seguir las siguientes recomendaciones:

§  Limpieza de junta: tanto en las baldosas como en las juntas de separación, siendo necesaria la utilización de la espátula u otro análogo para evitar que la pasta se mezcle con residuos.
§  Preparación de la pasta para juntas: se compone de cemento, pigmentos y marmolina, amasándose hasta que se obtenga un color lo más parecido a las baldosas (excepto que se especifique otra cosa). Lo recomendable es utilizar la pasta que el fabricante recomienda para el modelo de baldosa elegida.
§  Extendido de la pasta: se realiza en varias pasadas en todas las direcciones preferentemente según las diagonales encontradas en las baldosas con la ayuda de un rastrillo de goma. Posteriormente se espolvoreará con la pasta seca. Pasadas dos horas se procederá a la limpieza de la superficie, manteniéndolas húmedas durante 24 horas para evitar que se deshidrate durante el fraguado y endurecimiento.
§  Habilitación de pavimento: 48 horas después de la colocación, se puede transitar sobre el pavimento, debiendo esperar entre 4 y 7 días para continuar con las labores de construcción.

-          Pavimentos de exterior: el proceso es similar que para interiores diferenciándose en el material utilizado para el relleno de juntas, siendo en este caso una arena silícea muy fina y de buena calidad de tamaño 0/2. Debe extenderse seca para que penetre con facilidad entre las juntas utilizando escobas manuales o mecánicas. La arena sobrante se retira mediante barrido y nunca con agua a presión.

TRATAMIENTO DE ACABADO EN PAVIMENTO DE INTERIOR.

-          Pulido: se realiza para planificar la superficie pavimentada, eliminando las posibles cejas y homogeneizando el pavimento con una maquina de platos giratorios a los que se acoplan unas muelas (de cemento o magnesita y carburo de silíceo) abrasivas refrigeradas por agua.

El pulido consta de tres fases:

§  Descejado: transcurridos 4 a 7 días después del relleno de juntas con una muela de 60.
§  Pulido basto: Con una muela de 120.
§  Afinado: con muela de 220 para conseguir el grado de acabado deseado.

Finalizado el pulido con la máquina se repasarán los bordes con máquinas manuales. Pulida toda la superficie se lavará con jabón neutro y se protegerá la superficie pavimentada con serrín, lamina de papel grueso, cartón o plástico, o cualquier otra protección que ensucie o dañe el pavimento.

Pulido final u abrillantado: el último tratamiento de acabado depende del aspecto final deseado o el uso al que se vaya a destinar el pavimento. En interiores los más frecuentes son: cristalizad, abrillantado y acabado natural. Para exteriores se suele dar un tratamiento especial que impide la formación de eflorescencias, manchado por grasas o aceites, el pegado de chicles, etc.